El partido tendrá lugar, a puerta cerrada, de acuerdo con la suspensión temporal impuesta por el gobierno griego a los espectadores que asistan a los eventos deportivos, para limitar la propagación del coronavirus (Covid-19) en Grecia.
Nuestra posición es que el viaje supone un riesgo innecesario para nuestros jugadores, personal, seguidores y las familias de todos los que viajan, en momentos tan críticos e inciertos.
También nos preocupan nuestros adversarios, cuyos jugadores y personal han sido sometidos hoy a pruebas, y de los que ahora se espera que desempeñen su papel en un encuentro importante, en las difíciles y desafiantes circunstancias de que su propietario sufra con el virus.
También es decepcionante que el partido se juegue sin los aficionados locales y visitantes, ya que eso es parte de lo que hace que la competición europea sea tan especial, así como el hecho de que nuestros aficionados ya hayan tenido que enfrentarse a obstáculos similares en nuestro trayecto por la Europa League ya esta temporada.
Creemos que hay algunas cosas que son más importantes que el fútbol, y que la salud de nuestra manada y del público en general es una de ellas. Sin embargo, respetamos la decisión de la UEFA y la integridad de la competición, y viajaremos mañana a Grecia para jugar el partido.
Esperamos que nuestra petición a la UEFA, y nuestra aceptación de su decisión, pueda actuar como catalizador para que consideren opciones alternativas en el futuro, ya que este no será el último partido afectado por el coronavirus.